... Después de los 50- 60 años ¿Qué nos pasa?
Pues que entramos en la fase de MENOPAUSIA, donde la piel comienza a perder densidad y el tono luce apagado, la ralentización hormonal acentúa la disminución de las reservas en nutrientes esenciales tendiendendo a la desnutrición, haciéndose más evidente el envejecimiento cutáneo, la piel se hunde, se reseca y se arruga.
La secreción de las glándulas sebáceas y sudoríparas decrece también, faltan sustancias importantes para la construcción de la película hidrolipídica y el manto ácido protector, dando lugar a una piel quebradiza y pobre en grasa.
La sensiblilidad de la piel está en su punto máximo, reaccionando a los factores medioambientales adversos, a los malos cuidados, a la alimentación inadecuada, a la falta de sueño, al estrés... entre muchos más.
Ahora bién, sabiendo todo ésto: ¿Por dónde comenzar?
Es importante que comiences a vigilar tu DIETA. Debes estar sana para que tu cutis luzca vitalizado.
Una alimentación adecuada es:
Consumir: pescados azúles y carnes magras: preferentemente pollo y pavo (sin piel), carnes rojas (siempre desgrasadas) y cerdo, muy poco.
Incluye frutas de temporada.
Reduce el consumo de sal, preferiblemente lo horneado o hervido a lo frito.
Utiliza ensaladas y verduras aderesadas con aceite de oliva virgen, limón o vinagre.
Reduce notablemente la bollería industrial. Opta por consumir productos caseros y naturales, incluye frutos secos (almendras y nueces, no horneadas, ni saladas, ni tostadas).
Disminuye la ingesta de grasas saturadas* y NO consumas alimentos con grasas trans**.
Y SIEMPRE toma abundante agua y leche desnatada adicionada con calcio y en caso de intolerancia utiliza leche sin lactosa o yogures desnatados fortificados con calcio.
De todas maneras es recomendable consultar a tu médico para ajustar una dieta a medida y así podrás ver resultados óptimos.
AHORA, una vez encaminado el aspecto alimenticio, toca reforzar y enriquecer nuestro preciado cutis.
Primeramente hay que fortalecer la resistencia de la piel contra la DESHIDRATACIÓN. Y ¿Cómo conseguimos esto?
El calcio está considerado como un agente determinante para la cohesión cutánea y la síntesis de los lípidos epidérmicos. Una nutrición Intensa ayuda a reforzar la barrera cutánea.
También otros productos pueden contener Jalea Real que es un verdadero concentrado de NUTIENTES vitales (proteínas, vitaminas, lípidos) y es considerado un potente elixir reparador para la piel.
La Manteca de Karité combate los signos del envejecimiento en su origen para ofrecer una efectiva acción reconstituyente.
Los complejos de amino-péptidos pueden alcanzar unos niveles de hidratación intensiva sin precedentes.
Para obtener un alto poder de hidratación existe un producto clave: el
Ácido hialurónico. El cual forma una red de hidratación intensiva sobre la superficie de la piel evitando la pérdida de humedad.
Existen tónicos antiedad que refuerzan y son ULTRA-RECONSTITUYENTES Y NUTRITIVOS, su acción es evitar la sequedad, la flacidez, las manchas y el tono apagado de la piel.
Actualmente reconocidos laboratorios de cosmética nos proporcionan sus mejores avances de última generación dándonos a conocer cremas o serums que pueden tener una potente acción localizada para cada necesidad o verdaderos complejos antiedad, creados especialmente para
pieles maduras haciendo que nuestro cutis renazca de vitalidad.
Vocabulario:
Las GRASAS son una de las principales fuentes de energía para nuestro organismo, pero debemos hacer una correcta selección para gozar de una vida a pleno.
Las grasas saturadas* y trans** son las llamadas "grasas malas" porque son una de las principales causas de tener los niveles de colesterol elevados.
Las grasas saturadas se encuentran, por ejemplo, en:
-La mantequilla
-Las carnes grasas y embutidos
-Los quesos grasos
-La leche entera y derivados
Las grasas "trans" se encuentran, por ejemplo, en:
-Las grasas lácteas y en la grasa de las carnes rojas como el vacuno
-Productos con grasas PARCIALMENTE HIDROGENADAS utilizados en bollería industrial, panadería, pastelería, golosinas, dulces y chocolates
Abusar de este tipo de grasas hace que se aumenten los índices de colesterol "malo" (LDL) y disminuyan los de colesterol ‘bueno’ (HDL), favoreciendo el riesgo de padecer enfermedades cardiovasulares.
Además pueden entorpecer el metabolismo de la insulina y disminuir la capacidad vasodilatadora de los vasos sanguíneos.
Actualmente estan surgiendo fabricantes que cuidan al consumidor y para nuestro bien, proporcionan amplias opciones de alimentos desprovistos de este tipo de grasas.
Elige estar sana y serás aún más bella.
